El hotel es precioso, las habitaciones son bien equipadas y las camas son geniales. Un personal receptivo y muy servicial y un servicio excelente. Una ubicación muy buena, la mejor con una parada de autobús a un paseo del hotel. La comida en el bar principal está buena. Estaré de vuelta si vuelvo a Wellington.

Las camas eran súper cómodas, la habitación práctica, con un buen diseño, con todas las comodidades básicas. Tenía una ubicación fácil, relativamente cerca del Museo de Nueva Zelanda. Encima, estaba cerca de grandes restaurantes, de bares y de la bahía

El baño que tenía estaba poco limpio.

El motel está muy bien ubicado, cerca de restaurantes y de la playa. Además, está al lado del centro principal y de los lugares de interés de la ciudad. La habitación era amplia y cómoda, con una cama confortable. El servicio fue amable y educado, y las instalaciones estaban limpias y en buenas condiciones. ofrecían wifi gratuito y aparcamiento.

El aparcamiento del motel era pequeño y limitado, lo que podría dificultar encontrar una plaza disponible.

Tenía una habitación lo suficientemente espaciosa, cómoda y moderna, con café, todos los servicios y un dormitorio, dormí muy bien. Ubicación: el hotel estaba super cerca de supermercados, de galerías, de los restaurantes y tiendas. Además, estaba cercana a la terminal del ferry.

Es un hotel estupendo y lindo a un paseo de una parada de autobús. Una habitación bien equipada y de buen tamaño con una genial, café y también instalaciones para hacer té. Una ubicación sorprendentemente tranquila y muy buena, la mejor a poca distancia de un cine y un estadio. Pedimos el almuerzo en Plentifull Deli, situado cerca del lugar. Puede describirse como una experiencia excepcional, recomendaría este lugar.

Aparcamiento en el alojamiento, buen wifi, habitación amplia, cómoda cama, buena comunicación con los dueños.

Nuestra habitación era interesante a términos de precio, sorprendentemente nueva, con camas individuales, gran cuarto de baño y además una cocina americana. Tenía una ubicación práctica, bastante cerca del Courtenay Place. Había una calle comercial y una panadería justo a la salida del hotel.

La única cosa decepcionante ha sido el baño, estaba poco limpio.

Habitaciones ideales y también impecables, gracias por esta estancia maravillosa!!

Me han gustado mogollón el hotel y su decoración maravillosa. La ubicación era estupenda, el Museo de Nueva Zelanda estaba a una distancia media del hotel.

La cama era súper cómoda, el baño grande y había un climatizador, café y también instalaciones para hacer té en la habitación. Edificio de estilo victoriano, una vista bonita.

Un hotel victoriano de precio asequible. Nuestra habitación con 2 camas era recién remodelada y de buen tamaño, tenía unas camas súper buenas. Las instalaciones en el baño eran excelentes, sobre todo la ducha y el champú. Ubicación: el hotel estaba cerca de los lugares de interés y de una colina y también de los bares y restaurantes. Para la cena, fuimos a Garuda Truck and Eatery, que estaba cerca del lugar.